Con el tiempo me voy dando cuenta de lo fuerte que soy de mi fortaleza
interior y cada vez me resulta más difícil encontrar un hombre ya que me niego a mostrarme débil y delicada para que ellos puedan desarrollar su
faceta de caballero andante conmigo. Algún día encontraré un hombre que
se sepa que un caballero andante va más allá de la debilidad ajena y no necesite que yo sea una damisela
desvalida; y quiera ser compañero de viaje.
Es importante el
desarrollo del poder interior de la mujer, que por fuera es delicada y suave
pero el interior es tan poderosa, expansiva y creadora.