Toda la vida me han enseñado que si quería ser amada, si quería que todo
saliera bien, debía amar. Amar al prójimo, amar, perdonar, ser
comprensiva, transigir….
Siendo adolescente sentía dolor de no tener pareja,... amaba tanto, deseaba amar tanto….
Nadie me enseñó que primero debía amarme a mí, que todo ese amor
puro debía ser primero para mí, nutrirme hasta desbordar amor, y que
entonces aparecería (si debiese de aparecer) mi compañero.
Vivía obsesionada
con la media naranja de mi vida y "desperdiciaba" el amor más puro, sin
otorgármelo a mí misma.
Nadie me enseño que primero debía de aprender amarme a mí misma,
comprenderme a mí misma, valorarme a mí misma con mis defectos y
facultades. Posiblemente eso evitaría que mendigase cariño a quien no
quiere o no sabe dármelo, quizás eso me daría fuerzas suficientes para
dejar a un hombre que me humilla o que me maltrata física, psíquicamente o psicológicamente, por mucho que diga que me quiere y por
mucho que yo crea que le quiero.
Porque si aprendo primero a derrochar amor por mí misma y cuando rebosé
darlo a los demás, entonces mi entorno disfrutará de mi presencia porque
se nutrirán de mi amor y armonizaría todo mi entorno y la energía
universal me devolverá, exactamente lo que doy, osea amor en todas
sus formas.
La cuestión es que ni me enseñaron, ni lo vi en nadie de mi familia, ni de
mi entorno, y cualquier idea o actitud de encaminarme hacia ese punto era
aniquilada bajo el estigma de "egoísta" con coletilla has como…
"Como sigas por ahí te vas a quedar sola…";-,Y ahora a veces pienso:… "Más
me hubiese valido… ".
La cuestión ahora y hoy, es que fui lo suficientemente rebelde como para
irme separando de todo aquello, para ir a aprendiendo cual bebe gateante a querer poco a poco (y… Nunca dejo de aprender nuevas maneras) y a
separarme de las maneras de autolesión camufladas insertadas en mi
memoria celular cual programabas que se ejecutan solo y nada más
despertarse una….
Fui lo suficientemente cabezota de llevar la contraria actitudes y roles
que no iban conmigo, me separé de amistades que me impedían o no
apoyaban mi forma de sentir, que por mucho que las quisiera… Impedían mi
despegue… Hice el duelo correspondiente y me fije una meta:… Ser feliz,
ser feliz sola, acompañada, trabajando, de vacaciones, ser feliz… No me
planteé grandes metas, sólo averiguar que me hacía feliz (pequeños
detalles) y costumbres me impedían que fuera feliz los fui eliminando
uno a uno, poco a poco, reaprendiendo a vivir sin "Cliches". ,! porras
que difícil era !. ¿Estaba a gatas otra vez!... siempre aprendiendo…
Siempre desde cero… Cada vez… Porque está muy bien ser feliz,… Pero la
cuestión es que me habían enseñado que si haces cosas para ti misma para
ser feliz… Era malo ¡¡¡¡¡ERA UNA EGOÍSTA!!!...
sólo podía ser feliz a través de otros… Y si sufría o me hacían sufrir…
Tendría ¡¡¡¡el cielo ganado!!!!
Un día… En plena comunión con la naturaleza… Salto "el click" : .....es
absolutamente imposible encontrar la felicidad fuera de ti, lo demás es
servicio, y el servicio gratifica intensamente, la felicidad, está en el
interior, el corazón está en el interior, la paz está en el interior,
mi alma está en el interior, el dolor esta en el interior (¡te encontré!
Vamos afuera!) Y empecé el viaje interior, gateando, luego, andando a
veces retozando… A veces… Saltando al abismo… Como un acto de fe… Y
prometo que siempre que fue el interior… Jamás me despeñé.
Os invito a realizar puesto viaje interior… El exterior… Os lo agradecerá!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.